MANIFIESTO 36
ANIVERSARIO ASESINATO DE JAVIER VERDEJO
Hoy 13 de agosto,
cuando se cumplen 36 años del asesinato del joven almeriense Francisco Javier
Verdejo Lucas, las organizaciones convocantes: M.A.I.S. (Mesa Andaluza de la
Izquierda Soberanista: Nación Andaluza, Jaleo, Andalucía Comunista, JIRA, Red
Roja e independientes), Almerienses por la República, la Asociación por la
Memoria Histórica del Partido del Trabajo-Joven Guardia Roja, el SAT (Sindicato
Andaluz de Trabajadores) y el sindicato USTEA (Unión Sindical de Trabajadores
de Andalucía), queremos con este acto homenajearlo y reivindicar su figura como
víctima de la represión franquista.
Hace 36 años Javier intentó escribir en un
muro del callejón de San Miguel, hoy desaparecido, justo al lado de donde hoy
estamos, las palabras Pan, Trabajo y Libertad, momento en el que fue
abatido por las balas de la Guardia Civil. En aquellos días, año 1976,
hacía nueve meses que había muerto el
dictador Franco y su sucesor “por la gracia de Dios”, el Borbón Juan Carlos I
acababa de nombrar Presidente del Gobierno a Adolfo Suárez, tras la caída de
Arias Navarro a primeros de julio.
Javier era un joven almeriense de 19 años,
estudiante de Biológicas en Granada, militante
de la Asociación Democrática de la Juventud y de Joven Guardia Roja, las juventudes del
Partido del Trabajo, un partido de la izquierda revolucionaria que llegó a
tener notable influencia en la lucha política y en organizaciones de masas
durante los años 70, aunque acabó disolviéndose
hacia final de 1980. Algunas de aquellas
organizaciones de masas han
tenido y aún tienen un importante
peso en Andalucía, como es el caso del
Sindicato de Obreros del Campo (SOC) antecedente del actual Sindicato Andaluz
de Trabajadores.
Aquella noche
la JGRE formó dos piquetes para realizar pintadas con el
lema que entonces propagaba el PTE: “Pan, Trabajo y Libertad”. El piquete en el
que iba Javier con tres compañeros más le tocó pintar cerca de la playa y, fue
concretamente aquí, en el desaparecido Balneario de San Miguel, sobre una pared
del viejo edificio, donde Javier se
dispuso a escribir el lema mientras sus otros compañeros vigilaban. Sólo pudo
escribir la palabra Pan y la T.. de Trabajo ya que unas linternas a su espalda
le advirtieron de la presencia de la Guardia Civil. Javier trató de huir camino
de la playa, mientras que sus tres compañeros lo hacían en sentido contrario,
allí fue abatido por un disparo mortal y
cayó en la arena de la playa. El disparo fue efectuado de frente por un guardia
civil que le cerró la huida a una distancia de 6 metros, le entró por la
garganta y salió por el hueso occipital.
La versión de
la Dirección General de la Guardia Civil sobre lo ocurrido fue increíble,
dijeron que durante la persecución uno
de los guardias tropezó y el arma, un Z-62 se le disparó causando la muerte de
uno de los que huían, que resultó ser el joven de 19 años Javier Verdejo Lucas.
Pero hubo indicios sobre el asesinato que no estaban muy claros, como fue la
aparición de restos de sangre en el suelo, pared y techo de una caseta de baño.
Se tomaron muestras de sangre y se mandaron a analizar, sin embargo nunca se
supo el resultado del análisis y las diligencias terminaron archivándose por
falta de pruebas. Del guardia civil que disparó poco más se supo, por supuesto
que no se conocieron ni sus iniciales, nadie fue juzgado ni condenado por lo
ocurrido, ningún responsable militar ni político fue llevado ante un juez.
Paradójico fue
el hecho de que en aquellos momentos el
Gobernador Civil de Almería era Roberto García Calvo, que con el tiempo y por
arte de magia se reconvirtió en demócrata y llegó a ser hasta hace pocos años
juez del Tribunal Constitucional. Reconocimiento, compensaciones para los
franquistas que hoy hasta se permiten
dar lecciones de democracia; en efecto,
se dieron compensaciones y reconocimiento a los que colaboraron y fueron
participes del franquismo y, por el
contrario, se ignora y se silencia a los que de verdad dieron su
vida por una democracia real. Por eso este acto de hoy, de homenaje a Javier,
como el que venimos realizando desde hace 4 años, pretende ser sin
ambigüedades, un acto de denuncia política de ese “timo-chantaje” que fue la
mal llamada transición española y de esta democracia “que no lo es”.
En Almería no fue
sólo Javier Verdejo el único caído, contamos por desgracia con más víctimas de
aquella época. En este homenaje a Javier no
queremos ni podemos dejar en el olvido a Juan Mañas, Luís Cobo y Luís
Montero, del llamado Caso Almería, jóvenes que en Mayo de 1981 fueron
torturados y asesinados salvajemente por guardias civiles. O el caso aún más
ignorado y desconocido: el de María Asensio, una mujer de 32 años, madre de dos
hijos que falleció en la barriada de Overa (Huércal Overa) al ser disparada por
la guardia civil a corta distancia con una pelota de goma, cuando participaba
en una manifestación pidiendo agua.
Hoy está más
claro que nunca que la llamada transición democrática fue una estafa en toda
regla. No ha existido ni existe una democracia real. El sistema capitalista
españolista que padecemos, es una fiel continuación del franquismo. Dominan los
mismos sectores fascistas que ganaron la guerra civil y que implantaron una
terrible dictadura. Con otra cara, pero con la misma política: - el gran
capital español que sigue despojando a la clase trabajadora de todos sus
derechos, que mantiene a Andalucía en el subdesarrollo y sin soberanía. Hoy
nuestro pueblo sufre un 34% de paro, un 50% de paro juvenil. Uno de cada tres
desempleados en el estado español es andaluz, siendo los andaluces uno de cada
seis. Andalucía padece el mayor nivel de desempleo de Europa, similar al que
sufre el pueblo palestino. - la hipócrita cúpula de la iglesia
católica a la que nadie osa tocar en sus privilegios, - una justicia
fraudulenta y al servicio de los poderosos, - unas fuerzas del orden público
que en ningún momento fueron depuradas y que como estamos viendo en estos días
solo sirven para reprimir a la clase trabajadora - y unos políticos
incompetentes y corruptos que no sirven para nada, porque solo se dedican a
obedecer las órdenes que emanan de la banca y de los mercados.
Tan claro como
que, prácticamente, el estado español es el único que no ha condenado ni
perseguido a los responsables de tanto crimen y tanto sufrimiento, hasta en
Argentina acaban de condenar al asesino Videla, sin embargo aquí nadie ha
pagado por nada. Pero que vamos a esperar si hasta el partido hoy gobernante,
no solo no ha sido capaz de condenar el franquismo, sino que muchos de sus
miembros lo ensalzan continua y públicamente.
Afortunadamente
cada vez son más las personas que no se creen el “cuento del sistema” y las que
como nosotras y nosotros vamos a seguir luchando contra él y recordando a todos
los que cayeron por la verdadera libertad. La reivindicación de Pan, Trabajo y
Libertad por la que luchó y murió Javier Verdejo, sigue muy vigente en esta
Almería y en esta Andalucía de nuestros días.
RECOJAMOS SU TESTIGO.
JAVIER, HERMANO, NOSOTR@S NO OLVIDAMOS
M.A.I.S. (Mesa Andaluza de la Izquierda Soberanista: Nación Andaluza, Jaleo, Andalucía Comunista, JIRA, Red Roja e independientes), Almerienses por la República, Asociación por la Memoria Histórica del Partido del Trabajo-Joven Guardia Roja, SAT (Sindicato Andaluz de Trabajadores) y USTEA (Unión Sindical de Trabajadores de Andalucía)